YO QUIERO UN BESO

Yo quiero que me des un beso
que me quite el hambre, la tristeza, el frío.
Un beso con lecturas prohibidas;
un beso sucio, como basurita en el ojo
o dedo en el betún de un pastel ajeno;
un beso camaroncito: anaranjadito,
y en una cucharita, hacia tu lengua;
un beso murcielaguito: en tu boca y de cabeza;
un beso pop corn: hasta vaciar el tazón
sin que importe que espartanos adviertan la noche.

Yo quiero un beso, anda, no me digas: “estate”,
mejor dime: “va que va, acá estoy, no me muevo,
pare trompita, pare trompita”

Luis Daniel Pulido