lunes, 16 de junio de 2014

Y EMPEZAR, CUÁNTAS VECES SEA NECESARIO, DE NUEVO


A Gina


Cuando se es mucho mayor que la pareja
–hoy yo soy mayor para todo–
se asume un  tono regañón,
de cultura general hasta en los mínimos detalles:
el que provee, tiene derecho a colgar el teléfono,
a irse con los amigos –no me interesan los tuyos–
a disfrutar los mejores horarios del Mundial 14;
a muestras de cine, las maravillas helénicas,
libros de los que según yo no sabes

La edad, en mi caso, me ha hecho un tipo celoso,
y por ello  –joven y bonita– estás bajo sospecha:
me vuelvo cínico, caradura, egocéntrico

Que fuera de mí sin tu cariño,
sin la voz en alta  –la tuya–
cuando exagero la victoria de un texto comentado,
de otro pato  –en este caso de papel– sin cabeza

Que fuera de mí sin tu amor,
sin las discusiones de tu dicción,
tu falta de acentos en tus demandas
escritas de tu puño y letra,
por tu universo idílico con el rock,
por las carrozas que a medianoche
se vuelven calabazas por culpa del soccer,
modelos de la Europa del Este

Que fuera de mí sin las canciones que me compartes,
cintas de películas de cupidos que se ganan la vida
en Blockbusters

Así espero la noche,
a que llegues a casa,
a que bese tu frente,
a que empecemos de nuevo

Luis Daniel Pulido

No hay comentarios: