A Oriana Meléndez, mi joven amiga, por la vida y los jarritos de cerveza fría
Con tu permiso, me voy a casa a tener un ataque al corazón
Con tu permiso, me voy a casa a tener un ataque al corazón
Vincent Vega
Me gusta verte bailar, celebrar
contigo el decimoquinto disco
que no grabé, y que te sonrojes
de que –por ganas de no sentirme
lejos de ti- retrase los síntomas
de mi edad en un una mentira
piadosa: Tengo 28 años;
tres más de los que imaginabas,
diez más a la noche anterior
de esta confesión que a pesar
de todo te sigue esperando
a las puertas de tu ciudad,
cuando tomes mis manos
y el barco de rock ize de nuevo
las velas a tu corazón de fiesta
y olvidemos –de mutuo acuerdo-
la brújula y los mapas, seguros
de que no encontraremos
islas en altamar, aún cuando exista
gente que asegure verlos
contigo el decimoquinto disco
que no grabé, y que te sonrojes
de que –por ganas de no sentirme
lejos de ti- retrase los síntomas
de mi edad en un una mentira
piadosa: Tengo 28 años;
tres más de los que imaginabas,
diez más a la noche anterior
de esta confesión que a pesar
de todo te sigue esperando
a las puertas de tu ciudad,
cuando tomes mis manos
y el barco de rock ize de nuevo
las velas a tu corazón de fiesta
y olvidemos –de mutuo acuerdo-
la brújula y los mapas, seguros
de que no encontraremos
islas en altamar, aún cuando exista
gente que asegure verlos
4 comentarios:
Ajá, así que te la pasaste muy bien
Me da gusto
Besos
l
yo sé que bailas mejor que Vincent Vega, y como él, eres un matón de buen corazón (órale)
Karen:
Ahí estuvimos, fue una noche bonita
Gracias
Besos
Alejandra:
Tú si sabes. Claro que bailo mejor que Vincent Vega y no hay insecto volador que se escape de mi matamosca
¿Beso? ¿No beso?
Beso
te quiero luis daniel
Publicar un comentario