Liz Gallardo
No sabía que en los mil viajes
que marcaron el ritmo de mis pasos
al centro del cuadrilátero –en donde uno lucha
consigo mismo y no contra los golpes que da la vida-
el litoral de sangre acumulado en los dedos me llevaría
a una cafetería del D.F a hundir hasta el fondo de las catedrales
mi rostro (arroz y hoteluchos de los recién casados),
en el semáforo de peatones buenos y malos,
en tu mudanza de actriz y bella durmiente.
Pregunté por ti como quien se acomoda
en una placita para no alterar el movimiento
continuo de quienes alimentan a las aves,
las mismas que trazan un arco de pueblos
y haciendas donde renaces como Circe desnuda
y en fracciones de segundos te convierten en la reina
de mi pequeño libro de ilustraciones
-Vamos, hombre, se llama Liz Gallardo
y la puedes ver en la película El Búfalo
De la Noche- me dijo el editor en jefe
de pulcra sintaxis y gabardina de apuntes
venenosos
Puedo –y pude pensar- que no hay belleza
más noble sin puntos de vista que se confronten
en una cafetería de Coyoacán o Insurgentes,
en lo inteligente que puede ser en estos casos
agregarle miel de Maple a la leche y olvidar
que escribo un libro –figura eminentísima
de esta república de lectores- y disfrutar lo linda
que eres sin guías especiales y autosuficientes
como suelen ser los hombres menores de cincuenta años
Y te vi –te veo- tantas veces que cada día
que pasa estás más bella, no importa que tú filmes
en Sarajevo y yo escriba poemas sobre ciudades y perros
que marcaron el ritmo de mis pasos
al centro del cuadrilátero –en donde uno lucha
consigo mismo y no contra los golpes que da la vida-
el litoral de sangre acumulado en los dedos me llevaría
a una cafetería del D.F a hundir hasta el fondo de las catedrales
mi rostro (arroz y hoteluchos de los recién casados),
en el semáforo de peatones buenos y malos,
en tu mudanza de actriz y bella durmiente.
Pregunté por ti como quien se acomoda
en una placita para no alterar el movimiento
continuo de quienes alimentan a las aves,
las mismas que trazan un arco de pueblos
y haciendas donde renaces como Circe desnuda
y en fracciones de segundos te convierten en la reina
de mi pequeño libro de ilustraciones
-Vamos, hombre, se llama Liz Gallardo
y la puedes ver en la película El Búfalo
De la Noche- me dijo el editor en jefe
de pulcra sintaxis y gabardina de apuntes
venenosos
Puedo –y pude pensar- que no hay belleza
más noble sin puntos de vista que se confronten
en una cafetería de Coyoacán o Insurgentes,
en lo inteligente que puede ser en estos casos
agregarle miel de Maple a la leche y olvidar
que escribo un libro –figura eminentísima
de esta república de lectores- y disfrutar lo linda
que eres sin guías especiales y autosuficientes
como suelen ser los hombres menores de cincuenta años
Y te vi –te veo- tantas veces que cada día
que pasa estás más bella, no importa que tú filmes
en Sarajevo y yo escriba poemas sobre ciudades y perros
Luis Daniel Pulido; febrero 2010
11 comentarios:
y poemas donde la belleza es tan fresca como un vaso de leche.
Mis saludos.
Donde las aves despuntan el vuelo y hacen un arco de pueblos y haciendas y ella, desnuda como Circe, es coronada como la màs bella reina es hermosìsimo
Besos
Uh, directo al corazón
Besos
hola Luis.........en serio me escribiste esto a mi? si es asi, estoy muy conmovida y emocionada...........
te lo agradezco infinitamente!!!! ademas adoro la poesia!!!!
te mando un abrazo bien fuerte y gracias de nuevo!!!!!
Laura:
Y las galletitas, sopeadas, como un corazón que se muerde
Un abrazo y saludos de Rey Arturo
Yuri:
Gracias, una postal siempre refrenda territorios postales
Besos
Alejandra:
Es que quiero, con tan fina puntería, ir a las Olimpiadas
Besos
Querida Liz:
Si tú eres Liz Gallardo, la actriz de la película y que vi en el DF. mientras mi compañero me daba tus datos, pues sí: este poema es tuyo.
También me dijeron que te atropellaron para salvar a tu perrito, pero eso fue apenas hoy, cuando mi amiga Alejandra leyó el texto.
Un abrazo grande y cuídate.
Eres muy bonita
Lusito, espero que sea Liz en realidad y no una broma de tus "paisanos", que ya ves como te quieren. De todos, Liz Gallardo, debe estar muy, muy emocionada, como yo cuando te leo. Eres muy noble.
Cuidate mucho
tqm
Tú sigues siendo como un niño,eres un niño, por eso haces magia
Besos
hola Luis...............pues si soy yo y te agradezco infinito el regalo de tu poesia. Es un gran regalo.
Y si, tambien es cierto la historia de mi perrito, pero por fortuna la vida me dio otra oportunidad y sigo aqui dando lata, aunque desgraciadamete mi perrito Nelson no corrio con la misma suerte ni yo de seguir teniendolo a mi lado............
Te mando un abrazo enorme y muchas bendiciones!
Y gracias nuevamente..............
Karen:
Pues sí, es Liz Gallardo
Besos
Cati:
Si vieras que hoy me siento como tal, y al rato me voy al deportivo a chuar puros tiros a gol.
Si, es Liz Gallardo
Liz:
Me siento muy contento que me digas que te gustó el poema.
Estoy también muy agradecido contigo por tu mensaje y lo voy a celebrar con Choco Milk y un sándwich de pollo.
Siento mucho lo de Nelson, de verdad, pero qué bueno saber que estás bien.
Un abrazo enorme y espero verte en muchas películas
Luis Daniel:
Hoy escucho the prophet song de Queen, y me acuerdo de ti en cada guitarrazo, en cada armonía. Bueno, también está Tangerine de Led Zeppelin
Tu poema es hermoso
Besos
Tenías que sucumbir de nuevo ante la belleza jalisciese, porque Liz es también de Guadalajara, sí señor
Besos
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