Tengo la puerta abierta donde vivo, con sol adentro
JUAN RAMÓN JÍMENEZ
desde su lancha fantasma dan el visto bueno:
huele riquísimo el pescado frito;
el mar es un enjambre brilloso,
un laberinto de hombres colgados,
el sol cegador del hambre
La vecina cocina –y en las ventanas
una banda de rock and roll,
la lengua viva de las protestas,
nosotros –los mismos,
esperando a nuestros muertos
en cocinas ajenas donde fríen pescado,
el río siberiano donde flotan
los cuerpos mutilados
La vecina cocina –y yo estoy herido,
huérfano, vacío, adormitado entre los escombros
de la tarde,
aplastado por la panza de mi perro,
las utopías que me arrojaron a la calle
A lo lejos un plato de vuelo titubeante
aterriza en la mesa con un pescado frito al centro
¿Y la ensalada? –pregunto
Objeto Volador No Identificado
Luis Daniel Pulido
*Tomado de una frase escrita en una cartulina en la marcha de hoy en CDMX contra el pacto crimen/política.

No hay comentarios:
Publicar un comentario