domingo, 20 de octubre de 2013

¿Y LOS ROBOTS, VAN AL CIELO?


Para Jenny Beaujean

De lunes a sábado la luz encendida, los libros de música,
los acordes que se quedan fuera y tú –pluma en mano–
abriéndoles la puerta, el cuarto de los otros,
la ruta de aves migratorias

Buscar –contra el sol todo– el espejo donde se reflejan las sirenas,
el aire que avanza y evita se vuelvan luminosos los incendios

Y puede ser tu mirada, el horizonte, lo que leo en los diarios,
el cacto, la miel, el mate, casas de tejas y adobes

Hay ciudades que se levantan,
no importa qué tan difícil sea el final del día

Luis Daniel Pulido


2 comentarios:

Diana Vanessa Buscaglia Rodríguez dijo...

Hermoso poema, bellísima ella

cati covarrubias dijo...

Eres tan tierno

Adorable

Ya dejate y se mío