lunes, 8 de octubre de 2012

QUE NUNCA SE ACABEN LOS LUNES DE FUTBOL AMERICANO






 A Marina

La vida es incidental, se diluye y en su caída,
irónico, puede ser edificante aunque ésta sea
un parpadeo, un astronauta desprotegido,
una mirada triste con sus fuerzas móviles
de exterminio, ojos que se abren y se cierran
y no sacan provecho de nada, incluso del miedo
que da la palabra “cáncer” y nos atrincheremos,
de inmediato, en la última página de un libro
de Auster o Toscana o bien en el potentísimo
Dvd de Slayer en vivo

Nada cambia, quisiera decir, pero mentiría;
se escucha cómo Dios engulle la sopa
de la mesa sin ser invitado y me declara la guerra,
mordaz, silencioso, insolente

Yo no volteo a verlo; que otros se avienten por Él,
que otros se adhieran como moscas a su luz,
a sus camilleros y héroes solitarios,
que otros permitan su paso por la Tierra

Y aquí los pendientes, los “hubieras”, las Cruzadas para forjar este Imperio
que se derrumba y me hace borrar con los pies líneas de batalla
como si la profunda tristeza me hiciera un bombardero suicida,
el hombre en el sofá que fuma y calla y no escucha por cierta parálisis
visual y auditiva a causa de un disparo que no sé de dónde vino

Propósitos, muchos (siempre hago las cosas como si tuviera miles
de ases en la manga)  arcos sin flechas, paraguas, Mevlana Müzesi
e infinitos campos de trigo

Marina……


Luis Daniel Pulido

5, octubre, 2012

3 comentarios:

cati covarrubias dijo...

Vívenos siempre y haznos el amor todas las noches, todas ¡TODAS!

LoLiTa dijo...

Te amooooooooo!!!!

ana claudia dijo...

Guapo tú, guapa ella

Besos