martes, 13 de abril de 2010

GÁNSTERS EN LA ALAMEDA


Prólogo:

A Mayo


No me canso de caminar,
de ofrecer lo que tengo
por unos pesos: historias
de niños, compendios
de mapas ilustrados
de quien no tiene Google
y hace de todo lo que ve
una composisción literaria
que me salta –sin trucos y patinetas–
del uno al tres.

Me niego a buscar en los bolsillos
el entusiasmo, prefiero patear piedritas
antes de ver caer el monopolio
de mis monedas: colirio en los ojos
para el “cochinito”, ahorros que ya no son
habituales, apretujón de números,
piélago de hormigas.

No me canso de caminar,
de hacerlo bajo la lluvia
de esta mañana como tripulante
del Discovery, de demostrar
que entre tantas propiedades
la que me devuelve mi sonrisa
de súperheroe es la de mi arroz con leche.



GÁNSTERS EN LA ALAMEDA


A mis amigos Lidia Laflor y Vicente Arce, conversadores oportunos


Los conocí como lo hacen los que
“queman” discos y películas:
en la subgerencia del contrabando.
Ya Lidia me había escrito y platicamos
de un pollito que emprendió la fuga
en un cadillac rojo por retar a los arrancones
al narco. Pobre pollito, era bien enamorado –dijimos
mordiéndonos las uñas.

Cinco días después se unió Vicente,
amigo de Blue Panther y que en el Tenampa
de Garibaldi departió cervezas con el mismísimo
Súper Porky.

Hablamos –los tres– de noticias
y el terrible contratiempo que producen
los que las resuelven desde la acción
pública ávidos del aplauso.

–Chidos, los escritores de El Almohadazo –coincidimos.

Información sin salarios medios,
información sin cuotas raciales
en términos de que el blanco es blanco,
el rojo rojo, y el negro negro.

Lidia estudió periodismo y no se aclimata
al vaso medio lleno de lo que es Chiapas al cosmos,
a la mojigatería de los “hechos no palabras”.

Les firmé los libros que llevaba y los hombres
de la mesa recordamos a Queen en Puebla,
a Rod Stewart en la Corregidora de Querétaro,
los hits del momento, los bíceps que se fueron.

La señorita en la mesa apuntó
–con sus ojitos coquetos–
que eso no nos restaba encanto.

Al Pacino y Brad Pitt tomando café en el centro.

Quedan pendientes las películas de Kousturica,
inyectarle pasión a la rocola, y no parpadear
pajaritos cuando pasen muchachas lindas
que interrumpen la plática y me dicen

–Hola, pollito. Estamos arriba.

Carajo, he perdido mi identidad secreta.

9 comentarios:

marina dijo...

TÚ ERES, LO SÉ, NADIE ME LO DIJO, PERO LO NOTÉ EN TUS OJITOS, QUE EFECTIVAMNETE ERES SPIDER MAN. PROMETO NO DECIRSELO A NADIE

BESOS

Nicole dijo...

Y cuando caminas la vida como lo haces tú, me gusta ir de tu mano

Besos

Lidia Laflor dijo...

Y que los tiempos siguen cambiando.
Los guapos y la reina están ocupados resolviendo crucigramas burocráticos, un poco de la vida de los demás. Menudo lío, señores!

Desde la trinchera, Deemi More que muere por levantarse tarde a preparar los huevitos revueltos y el jugo de naranja para el marido pensionado.

Saludos y un abrazo bien fuerte por partida doble.

cati covarrubias dijo...

Al final, seremos los mismos, con Dana cuidándonos desde el cielo

Te admiro y te quiero

Denisse. C.C dijo...

Luis Daniel:

Eres fuerte, como una enorme montaña de luz

Besos

luis daniel pulido dijo...

Marina:

Okey, guárdame el secreto, el Duende Verde podría hacernos daño

Besos

Nicole:

Soy el hombre de la casa; nadie les hará daño. Lo prometo.

Besos

Lidia:

Vaya que sí, menudo lío. Pero los abrazos por partida doble, reactivan mi sentido arácnido

Un abrazote

Cati:

Dana siempre nos cuida, y sigue con nosotros; nunca se fue, nunca se irá

Gracias, amiga, gracias

Denisse:

Gracias, aunque una montaña a dieta, y rigurosa

Besos

Lord Edramagor dijo...

Alguien, hace algún tiempo, me dijo que los verdaderos -es difícil definir a qué se refería, pero algo tenía que ver con la desintegración del mundo propio y único- se embarcan (quisiera decir, nos embarcamos) en naves espaciales como quien monta un misil o la semilla de un bombardero, para encaminarse, directo y sin escalas, hacia ningún lugar -y con ningún lugar, siempre se refiere (el que me lo dijo, o los que me lo dijeron), hacia ese punto en el que nunca se está solo y nunca se es tan diferente como para no poderse poner en los zapatos de otro-.
Entre tantos guiones y paréntesis, sólo tendría que agregar que siempre es un gusto orbitar por este espacio suyo, para luego seguir el viaje.
P.D. Tenemos un cartón de frías pendiente. Abrazos!

ana claudia dijo...

Niño, mi niño travieso...............

Besos

luis daniel pulido dijo...

Querido amigo, Lord de Lords:

Un placer enorme su visita, sus palabras sobre la vida: análogas, símiles, metáfora, bum.

Cada día renacemos, y hoy quiero hacerlo entre los brazos de una tijuanense que ayer detuvo miradas en el centro de Tuxtla Gutiérrez.

Un abrazo

Claudia:

Ojalá volvamos a los aeropuertos, a reencontrarnos para olvidar lo feo que es este lugar

Besos